La Sierra del Montsant es una de esas sierras que podemos calificar de humildes, en el mejor de los sentidos. No es ni muy grande ni muy alta, ni muy conocida, más allá de las gentes de las proximidades o de aquellos que se sienten a gusto paseando entre el silencio formado por los sonidos del viento, de los pájaros y grillos, en lugar de por los gritos de los turistas.

Este paraje está situado en la provincia de Tarragona, y forma parte de la Cordillera Prelitoral catalana, en la comarca del Priorat.

Su punto más alto es La Roca Corbatera (1.162 m.). La extensión total del macizo es de unos 135 km. cuadrados, muchos de los cuales forman parte del parque natural.

La vegetación es de tipo mediterráneo ( pino blanco, carrasca, encina, pino rojo, avellano, acebo, tejo, álamo, fresno, sauce...). Entre su fauna, destacan animales como la jineta, el gato montés, el hurón, el halcón, el águila perdicera, el águila real, además de numerosos anfibios, peces,invertebrados y un largo etc.

Pasamos los últimos días de agosto acampados en las cercanías de Ulldemolins, junto a la ermita de Santa Magdalena. Tuvimos momentos de lluvia, de sol, de viento, de tiempo fresco (dentro de lo fresco que puede ser el tiempo en agosto), y, sobre todo, muchas, pero muchas moscas. O sea: muchísimas moscas pequeñas y tremendamente insistentes en rodearte en todo momento. Resultaba curioso como, intentando encuadrar mirando por el visor, continuamente pasaban por delante del objetivo, se ponían encima de la lente, se llenaba, literalmente, la cámara de moscas que paseaban por encima de ella mientras unos cuantos cientos te revoloteaban alrededor sin parar, durante todo el día. Bueno, no hay más remedio que acostumbrarse.

El caso es que estos parajes nos han proporcionado momentos e imágenes de lo más variopintos: desde el gran paisaje al detalle diminuto, en una zona relativamente pequeña en que nos movimos, encontramos centenares de ocasiones para hacer fotografías.

Realmente, vale la pena pasarse por la Sierra del Montsant y disfrutar de ella con calma, observando, oyendo, mirando y captando todo aquello que el ruido que inunda la vida de la mayoría de nosotros no nos deja percibir.

Las fotos que dejamos aquí están hechas, en su mayoría, con la Lumix FZ200. Unas pocas, con la Lumix G1.